La convocatoria pasada pasó lo mismo, gente poniendo notazas, gente que conocía gente que tenía notazas, gente que conocía gente que se había preparado Secretarios y se presentaba a Auxilio, gente que se presentaba a Gestión y que dominaba el temario y por eso no tenías nada que hacer, gente con 95 en los 2... etc.
Pues yo saqué mi plaza y en un puesto muy bueno, después de pasar unos días muy perros por no decir otra cosa gracias a la "gente".
La forma de afrontar determinadas situaciones varía mucho de unas personas a otras. Pero es que además, uno crea un estrés a otras personas que es innecesario, porque bastante estresante es pensar que estás dentro y que si no lo estás es por esa estúpida pregunta que siempre contestabas bien menos el día del examen, que te volviste idiota y la contestaste mal contra todo pronóstico. Bastante estresante es estar a la espera de que llegue el día en que veas o no tu nombre en una lista.
Yo entiendo que uno se ponga en lo peor y que luego de saltos de alegría, yo también soy bastante parecida. Pero ahora es momento de hacer que la espera sea lo más relajada posible, de ponerse en la piel de otros, y no digo que haya que dar falsas esperanzas porque nadie sabe nada a ciencia cierta. Pero ni una cosa ni otra, por favor.
El que está rozando el corte, ese sí que tiene motivos para estar preocupado. A ese no me atrevería yo a decirle nada, porque como dice la canción de Manolo García, "si lo que vas a decir no es más bello que el silencio, no lo vayas a decir".Y lo digo por experiencia. Menudos diítas se pasan.